lunes, 17 de febrero de 2014

Aspiración profesional de un docente

A LO QUE ASPIRO EN MI TRABAJO Y EN LO QUE QUIERO ENFOCAR MI ESFUERZO

-Breve Reflexión-

 

                             
¡Qué curioso! Buscaba un poema y, mirando por encima una libretita negra mouleskine, me he encontrado con una breve reflexión, que plasmé mientras estudiaba el conductismo, hace tiempo, cuando era profesor en Extremadura y aún no tenía ni idea de qué era eso de las Competencias Básicas ni había leído nada de Augusto Cury. De hace seis años o así. Lo sigo suscribiendo. Sé que aún no lo he conseguido, pero creo que no debería dejarme distraer de este macroobjetivo:
     Skinner, que además de describir la conducta quería controlarla, pedía que no se enseñase a los niños a pensar.
     Eso es precisamente lo contrario de lo que quiero hacer como docente: no aspiro a controlar conductas; pretendo enseñar a pensar; o, al menos, DOTAR a mis alumnos de recursos nuevos que inciten su libre pensamiento.
                            
     ¿Cómo no pretender esto? ¡Pero qué difícil es! Con esto me opongo, sí, a los radicales de hacer las cosas como siempre y basta (trasunto de comodidad, esa "ley del mínimo esfuerzo" que luego ellos echan en cara a adolescentes y niños -Have we forgotten we're all children?-) pero de la misma manera a los del otro extremo. Precisamente en esa época, a los otros igualmente extremistas. Tengo apuntado: Dogmatismos de sindicatos, instituciones, corrientes de lo políticamente correcto ligados a los mass media y el consumismo-materialismo-relativismo, ... Porque en aquella época (¡y ahora!) me parecían profesionales de la técnica y la forma despreocupados por el contenido, por el peso del razonamiento y la reflexión profunda (lo que sotto voce calificaba yo de "chipiguaísmo", un "buenismo" excesivo) a los que habría que traer las palabras de Unamuno, ese que no se casaba con nadie en pro de su libertad de pensamiento y de duda, quien dijo algo así como: Quien pretende enseñar jugando acaba jugando a enseñar.
                     
     Seriedad y esfuerzo. Ilusión y profesionalidad. ¡Qué equilibrio tan difícil! Honestidad y técnica. A question of balance. Por eso, ¡sí!, ¡claro!, al trabajo en competencias, al CIL, a todo esto, si se hace en serio. Pero para superficies no tenemos tiempo (Now I know the only foe is time).
                      
Texto: José Alfonso Bolaños Luque (las citas en inglés, en cursiva y ocre, son de temas de los Moody Blues).
Mi siguiente artículo-guía en este blog relacionado con la Educación versará sobre la Cultura del Esfuerzo y las Clases de Motivación. Probablemente tardará: tengo que corregir trabajos. Saluditos.


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