sábado, 7 de mayo de 2011

IMPRESIONES Y LECCIONES SOBRE THE MOODY BLUES (I)

LOS MOODY BLUES EN ESPAÑA. PRESENTACIÓN DEL GRUPO.


                                            Won't you take me back to school? I need to learn the Golden Rule.

Hablar de The Moody Blues es hablar de uno de los más grandes grupos de rock en la historia de la música. Hacerlo en España es como hablar en chino. En este país no se le reconoce como lo que son, y esto a pesar de su gran popularidad desde finales de los 60 hasta hoy. De hecho, el episodio de los Simpsons donde aparecen Justin, Ray, John y Graeme un español medio no lo entiende (es incapaz de comprender el humor que se desprende de la absoluta descontextualización que se provoca; la ironía no se entiende, porque no se conoce al grupo, ni su poesía, ni sus melodías, ni los contenidos de sus letras; resulta imposible aquí captar lo inaudito de verlos en un casino y usando la violencia contra Homer).

     En este sentido, me considero un privilegiado. Entre los muy variados y abundantes discos de mi padre, desde muy joven topé con ellos, con varios de sus mejores discos (A Question of Balance, Seventh Sojourn, Octave), y aún hoy permanezco incansable descubriendo y disfrutando su música. Cuando se me pregunta por ellos, siempre tengo que referirme al Nights in white satin, único hit que, generalmente tarareándolo, se reconoce en este país. Lo cual deja a mi interlocutor con un mero cliché del grupo, y luego ya no quiere saber nada.

     Pero los Moody Blues son MÁS que el inmortal Nights in white satin. Su estilo es inconfundible (otro día no muy lejano expondré sus características más sobresalientes) y al mismo tiempo han sabido ir adaptándose a las diferentes épocas en las que han dejado huella: finales de los 60, los 70, los 80, los 90, ...
    
     ¿Cuál es su estilo? Generalmente se les califica como pioneros del ROCK SINFÓNICO. Cierto, hacen rock sinfónico, pero asimismo se les considera PADRES DE LA PSICODELIA (ahí queda su homenaje a Thimoty Leary y la admiración que sentía por ellos Pink Floyd). Sin embargo, si cayera en tus manos el Long Distance Voyager, los calificarías de grupo POP. Habría que investigar, entonces, no quedarse en la superficie ni en la etiqueta. Son rock sinfónico, son Justin Hayward, son el Nights in white satin, pero no son "sólo" eso (y si sólo lo fueran, seguirían siendo grandes, pero son mucho más).
   
     En la próxima entrada, hablaré de cómo se podrían dividir sus trabajos por "estilos" y cronológicamente.

miércoles, 4 de mayo de 2011

REFLEXIONES SOBRE EL BIG BANG

En el principio de los principios toda la materia-energía que ahora se expande y se expande, y a la que llamamos Universo, estaba concentrada en un solo punto. De esto hace billones, quién sabe, ¿trillones? de años.
            Todo a su alrededor, arriba, abajo, al frente, detrás, a los lados, era un infinito absoluto de vacío, un espacio sin nada, inabarcable. Tal vez, a una distancia de infinito más infinito, o quizá más, existiese otro punto que concentrara a su vez toda la materia-energía como para expandir luego un universo distinto del nuestro. Y más allá otro, y aún otro más infinito elevado a infinito veces. ¡Quién sabe! El caso es que el nuestro, de no poder aguantarse a sí mismo ni un minuto más, de lo tan reconcentrado que estaba, explotó: el gran petardazo, el big bang.
            Ahora bien, ya que no sólo el espacio es infinito, sino también el tiempo, podríamos hacernos dos buenas preguntas. La primera: ¿cuánto tiempo se pudo aguantar a sí misma la gran bolita energético-material sin explotar y por qué lo hizo, si todo a su alrededor era vacío y nada de nada (y, por tanto, nada externo pudo condicionar un cambio)? Y la segunda: ¿siempre hasta entonces había sido bolita, o fue otra cosa en un pasado hiperremoto? Quiero decir: ¿de dónde salió?
            Conclusión: no somos nada, compadre.

Nuevo Blog

Estoy comenzando a crear un Blog. Todo gracias a Ángela Bracho.